Con un diseño sobrio pero distintivo, este espejo rompe con la rigidez de las formas clásicas gracias a sus lados superior e inferior curvados y esquinas redondeadas, lo que aporta una estética suave y contemporánea. El marco metálico, acabadoen oro envejecido, se posiciona por delante del espejo en sus lados verticales, creando un efecto de profundidad sin ocultar el reflejo. Esta disposición resalta el juego entre forma y función, convirtiendo la pieza en un elemento decorativo mas allá de su uso práctico.
Ideal para espacios que buscan un toque artístico, este espejo es perfecto para zonas de paso, entradas, dormitorios o baños con un enfoque estilístico cuidado.
72cm x 135cm x 4cm
